—Esto es imposible... —dijo Lila sin aliento cuando vio el lugar que Jedrek había comprado para ambos. Bueno, darían la bienvenida a un nuevo miembro a su pequeña familia en unos tres meses desde ahora, ya que Lila ya estaba embarazada de dos meses.
—Porque solo le tomaría cinco meses hasta dar a luz. Así que si uno la miraba de cerca, notarían la ligera protuberancia en su estómago que a Jedrek le encantaba verla así. Pensaba que se veía muy sexy de esa manera, especialmente desde que Lila ahora había ganado más peso y esto resaltaba las curvas de su cuerpo.
—Por supuesto, esto es posible —Jedrek sonrió y tomó la mano de Lila para entrar en su nuevo lugar. El lugar que llamarían su hogar. —No quiero que nuestro primogénito viva en ese pequeño apartamento —gruñó cuando dijo esta frase, lo que hizo reír a Lila a carcajadas.