La Última Frontera [Pt 1]

—Maldita sea…

Rey se encontraba en el corazón de la dimensión retorcida, su respiración constante a pesar del caos a su alrededor.

Clones de Adrien llenaban el vacío.

—¡Qué vista tan interesante, Rey!

—Has durado tanto tiempo. Ni siquiera puedo contar cuántos 'yo' has matado a estas alturas.

—¡Impresionante! ¡Muy impresionante!

—Pero no sirve de nada, ¿sabes?

—¡Ríndete!

Miles—tal vez millones—lo rodeaban en todas direcciones, sonriendo con la misma sonrisa confiada, los mismos ojos crueles, cada uno idéntico pero sutilmente diferente en poder y presencia. El espacio a su alrededor estaba deformado, como un lienzo de vidrio roto pintado en tonos interminables de rojo y violeta. Estrellas colgaban inmóviles en el cielo como brasas muertas, y el tiempo mismo se sentía congelado, o tal vez estirado.

Este era el mundo de Adrien ahora.