Vago

—Estoy de acuerdo —afirmó Oberón antes de que sus manos se movieran rápidamente en el aire, grabando palabras que se transformaron en un orbe dorado que flotó hacia Atticus.

La mirada de Atticus se encontró con la de Oberón, y este último asintió de manera reconfortante.

—Es un medio para transmitir información.

A pesar de las palabras de Oberón, Atticus aún examinó el orbe. Al no encontrar nada malo en él, lo tocó y absorbió su información.

Atticus procesó el conocimiento en menos de un segundo, su expresión permaneciendo impasible.

Su mirada se dirigió hacia Oberón, quien ya lo observaba.

—Podría funcionar —finalmente dijo Atticus.

Oberón asintió. —Naturalmente.

—No hay contramedida directa para su técnica. Ningún método de detección que funcione universalmente. Ninguna manera inmediata de despojarlos de su disfraz.

—Por eso no intentamos detectarlos —interrumpió Oberón—. En su lugar, establecemos algo que no puede ser falsificado.