—¿Qué pasó? —preguntaron los Gumins mientras miraban a su compañero con una expresión confundida.
—No lo sé... Mi garra se rompió —respondió el otro Gumin.
—No te preocupes... Lo mataré —habló el otro Gumin mientras colocaba su garra alrededor del cuello de Anon y presionaba con toda su fuerza.
*Crac-Crac*
*Thud-Thud-Thud-Thud-Thud-Thud-Thud-Thud-Thud*
Su garra se rompió de la misma manera y cayó al suelo, justo como la del otro.
—¿Qué demonios está pasando?
—¿Está usando magia o qué?
—No, él no puede usar magia aquí... Es algo más.
—¿Me estás diciendo que es físicamente fuerte como para romper una Garra de Gumin, después de comer esta mierda?
...
La gente comenzó a hablar sobre Anon ya que no entendían qué estaba pasando.
Los Gumins inmediatamente se dieron cuenta de esto y decidieron no atraer más atención hacia Anon.
—¿Cuál es tu nombre, Humano? —preguntó el Gumin.
—Frishio —respondió Anon con una expresión neutral.