*Ringggggggggggg*
Tan pronto como este sonido resonó dentro del Laboratorio, todos dejaron lo que estaban haciendo y empezaron a caminar hacia sus habitaciones.
Cuando Anon empezó a caminar hacia su habitación, la mujer enana inmediatamente detuvo su camino.
—¿Por qué no vienes a mi habitación esta noche? Quizás, tengas suerte —la mujer enana habló mientras movía sus pechos frente a Anon.
—¿En serio? ¿Eres esa mujer desesperada? —Anon preguntó con una expresión seria.
—Oh, estoy más que desesperada si tú eres la única oportunidad que tengo de salir de este maldito lugar.
—Entraste en este lugar, debes saber cómo salir también. Solo llévame contigo y yo
—Aburrido... me voy a mi habitación —Anon habló con expresión aburrida mientras comenzaba a caminar hacia su habitación.
—¿Qué demonios-, Oye, escúchame... espera —la mujer enana gritó mientras comenzaba a seguir a Anon.
—¿Por qué me sigues? —Anon preguntó mientras miraba a la mujer enana con una expresión aburrida.