Dominio De La Gran Cacería

Dentro de la mente de Jin-Sil, ya había pasado más de una hora y su cacería todavía no había dado frutos. Pero muchas cosas habían cambiado desde el comienzo.

El primero de estos muchos cambios era que ella estaba de vuelta en las planicies del principio. Jin-Sil había logrado calmarse lo suficiente para ser llevada de vuelta al inicio de su cacería, donde un aire pacífico aún reinaba supremo.

El siguiente cambio era que ya no corría tras el ciervo. Por más que lo intentara, incluso en este entorno llano sin obstáculos, no podía golpear al ciervo ni siquiera alcanzarlo.

Nunca se quedaba sin aliento y seguía siendo tan escurridizo como siempre.

En lugar de eso, ahora estaba sentada en la cima de una pequeña colina, disfrutando de la vista de las nubes y tomando grandes bocanadas del aire dulcemente perfumado a su alrededor.

Y por último, el ciervo, al cual ya no se molestaba en perseguir, había terminado de burlarse de ella por completo.