Ya fueran Dioses, Originales de rango Trixor o seres de un rango de cultivo inferior, todos ellos se adentraron en el refugio con un mismo objetivo en mente.
Matar a Nial.
Los rumores acerca de Nial se habían esparcido, diciendo que había caído enfermo después de asesinar sin piedad al Dios Divino de la Verdad.
Se decía que había agotado su fuerza vital en un intento desesperado por matar a un Dios Divino justo después de ascender a la divinidad.
Pero si los rumores eran ciertos o no, ni siquiera importaba. Solo importaba que Nial no había sido visto por el alrededor de un año y que sus fluctuaciones de energía habían sido descubiertas en el centro del Refugio Orión.
Sus fluctuaciones de energía no se movieron ni un milímetro a lo largo de un año, dándole suficientes razones para creer que Nial estaba verdaderamente enfermo.
Esto atrajo mucha atención, suficiente para que cientos de millones de seres atacasen el refugio.
Solo había un pequeño problema.