—Después de obtener La Espada del Infierno, el Maestro Santo se volvió aún más formidable. Si queremos matarlo ahora, podríamos tener que pagar un precio más alto —Zain Ellsworth estaba enfocado únicamente en la venganza.
Era el jefe Supremo Anciano del Valle del Rey de la Medicina y sentía un profundo afecto por muchos de sus miembros, incluyendo al Dios de la Medicina y muchos otros Ancianos Supremos, con quienes había pasado mucho tiempo. En el corazón de Zain Ellsworth, el Valle del Rey de la Medicina era su hogar. Y la gente del Valle del Rey de la Medicina eran su familia. Ahora, con su hogar destruido y sus seres queridos asesinados por el Maestro Santo, su corazón estaba lleno de resentimiento indeleble.