La Gran Serpiente Cediendo ante la Pequeña Serpiente

—Empujando a Parker con su codo, con comida en la boca, Bai Qingqing dijo con tono apagado —Ayúdame a pelar una naranja.

—Solo entonces Parker salió de su trance. Rápidamente tomó la naranja en la mesa y solo se le ocurrió preguntar después de haberla pelado —¿Winston te encontró esto?

—Mm —Bai Qingqing asintió—. Aunque sabe horrible, mi apetito mejora después de comerla. Debo comer más por el bien de An'an.

Había un toque de amargura en la sonrisa de Bai Qinqing. Su mano con el palillo se detuvo y dijo con un suspiro —Ayúdame a exprimirla en jugo de naranja.

—De pie detrás de ella, Parker la abrazó con un brazo y la acarició tranquilizadoramente —De acuerdo.

La atmósfera de repente se volvió un poco sombría. Parker silenciosamente sostuvo a Bai Qingqing en sus brazos mientras ella comía en silencio.

Aullido~

Hambrientos por más, los cachorros de leopardo molestaban a su mamá por más comida. Este acto alivió fácilmente la atmósfera opresiva entre ellos.