Fiona chilló de emoción una vez que estuvieron fuera de vista y rodeó a Jazmín con los brazos una vez más para darle un abrazo como es debido.
Ella la miró de arriba abajo y no pudo dejar de sonreír.
—Mira cómo estás. ¡Qué bueno verte! —dijo Fiona—. Estaba preocupada de que nunca regresarías. Estaba muy preocupada de que algo malo te pasara.
—De verdad que es bueno verte de nuevo, Fiona. —Jazmín dijo con una sonrisa genuina.
—Tienes que contarme todo lo que pasó. Cada cosa. —dijo Fiona—. Quiero saberlo todo. Todo.
Jazmín soltó una risa incómoda. —No hay mucho que contar.
Avanzaron por el camino y encontraron su camino escaleras arriba mientras Fiona la arrastraba.
Una vez que entraron en la habitación de Fiona, Fiona la obligó a sentarse en la cama.
—Primero que nada, ¿qué quiso decir Xaden con que esa chica terrible abajo es su hermana? —preguntó Fiona.