—Así que Lilly se encargó de mi trabajo en la manada. —Jazmín dijo, cambiando el tema de su bebé.
—Sí —Fiona dijo—. No me gustan las tareas del hogar, como sabes, así que cuando ella se ofreció no tuve problema.
—Me siento terrible —Jazmín admitió—. Xaden es su compañero y aquí estoy yo embarazada de su hijo.
—Bueno, no podemos tener todo lo que queremos, ¿verdad? —Fiona arqueó una ceja mientras se metía una cuchara de pudín de chocolate en la boca.
—Supongo que no podemos. Pero ella ha sido amable conmigo —Jazmín dijo—. Y me sorprendió. Esperaba que fuera vengativa y odiosa hacia mí. Nada como Anna.
—Dioses no —Fiona sacudió la cabeza—. Anna es un monstruo. Me sorprendió que estuviera toda sonrisas. Sé que es solo para las apariencias, pero aún así me sorprendió.
—Todavía no puedo creer que él me trajo a esta habitación —Jazmín señaló—. Este es el dormitorio de su madre y él eligió traerme aquí. Hay tantas otras habitaciones en esta manada. ¿Por qué aquí?