Cansados

Morrigan me enseño hacer magia amor, como la que hace Velaria, pero distinta.

-Dos cosas, ¿Cómo que sabes hacer magia? y sigues diciendo mal su nombre amor, la primera e va acompañada de una i y la primera a de su nombre se pronuncia como una e.

Pensaba protestarle, pero comencé a decir su nombre hasta que me saliera bien, cuando decía mal el nombre de Vel, ella me miraba algo descepcionada, así que al menos la próxima vez que nos viéramos podría decir bien su nombre.

-Velaria, mucho mejor así.

-Perfecto, ahora respóndeme sobre el asunto de la magia.

-Creo que talvez me pase un poco con decir que puedo hacerla, apenas y genere una llama negra un poco más pequeño que un fosforo, aunque, Morrigan se sorprendió bastante por ello, dijo que no era algo normal que lo hiciera a la primera, o eso creo.

Hero se me acerco al rostro, por un momento pensaba que quería besarme, pero no fue así, se quedo viéndome fijamente.

-¿Qué sucede amor?

-Es raro oírte hablar sobre una diosa que siempre creí una leyenda, y te brillan los ojos cada vez que la mencionas, eso no me gusta, solo pienso compartirte con Vel, y nuestra niña, con nadie más ¿me entiendes?

Agarre a Hero de la cintura, como si me perteneciera.

-Alice entiéndelo, tu eres mi mundo, incluso si estuviéramos con Vel, y tu murieras yo no podría seguir sin ti, no ahora que estoy de vuelto a ti.

-No deberías decir eso mi amor, se que no tenemos nada con ella aun, pero si queremos que sea nuestra pareja, el amor, debe ser igual entre los tres, si alguna vez me pasa algo, quiero que sigas al lado de ella, Gran.

-El día que tu mueras yo también lo hare... basta no quiero pensar en ello, el vacío que se siente en mi corazon es enorme, aun no puedo perdonarme lo de Helen, siento que es egoísta que yo este muy campante en tus brazos despues de lo que le paso a ella.

Hero me dio un besito en la comisura del labio, para luego acariciarme el rostro.

-Se que no la conocí, pero si te amo, creo que estaría feliz de que la recordaras y de que hagas tu vida hermanito, además, yo me hubiera metido en su relación, de eso estoy segura, no podría permitirme verte con otra mujer, a excepción de Vel. Tranquilo, no llores, al final nosotros siempre estuvimos destinados a estar juntos. - Dijo Hero acurrucándose en mi.

Destinados juntos, creo que en eso tenia razón, no podría concebir un mundo sin ella.

La noche dio paso al día, cabalgábamos hacia la larga fila de carpas que adornaba la pradera que colindaba con el bosque. Muchos nos saludaban al pasar como si nada hubiera pasado, eso me preocupa. Segun Roy toda iba normal, incluso le pregunto a un amigo que estaba por acá, y no sabia mucho de nosotros, solo que El Ogro estaba molesto por que mi llegada tuvo que ser hace cinco días, y las cosas no estaban yendo bien para "nosotros".

-Sir Gran, gusto de estos ojos que bien aventurados se alegran de verlo.- dijo un hombre en sus treinta y muchos.

Yo la saludé, pero no supe muy bien que decirle, no reconocía al hombre que me hablaba, que había notado mi desconcierto.

-Soy Falin Wick, probablemente no me recuerde, pero luche junto a usted en la batalla de la pradera, fue un honor haber estado con usted Sir Gran.

-El honor es mío Señor Wick, y no es necesario que me llame por mi título, me resulta extraño que alguien mayor me llame así... Por el amor de Morrigan, si te recuerdo, era el que secundo el toque del cuerno.

Me baje de Rigan mi corcel dejando a Hero a cargo de el, en ese momento olvide por un segundo que Hero no sabía llevar las riendas del caballo, así que se quedó quieta a mitad del camino.

-Señor Wick, debo agradecerle, sin usted le juro que estaría muerto, si no hubiera...

-No se moleste en agradecer, además fue entrenado por el mismo Maestro Willfest que veo que aún lo acompaña. - Wick hizo una pequeña reverencia hacia Will, algo que tuvo que haberle alegrado, pese que se mantuvo con un semblante estoico. - Además gracias ustedes salimos vivos de ese infierno, cuente conmigo para lo que le necesito, el escuadrón de los combatientes de lanzas está con usted sir Gran.

Yo iba a volver a decir que no era necesario tanta admiración hacia mi, pero Will se bajó del caballo para que evitará hablar.

-Mi Sir, está agradecido, y espera contar con ustedes en el futuro si es necesario, y quiere preguntarles, ¿Cómo están yendo las cosas?

No pude evitar mirar a Will, pero tenía razón en lo que hizo, si quería tener hombres que me ayudarán con mi plan, tenía que comenzar a aprovecharme de estás situaciones.

-Las cosas están mal, llevamos sin avanzar durante una semana, las cosas están estancadas y pareciera que a nuestro Sir comandante el Ogro no le importará, es más es como lo disfrutará. - menciono el confidencia Wick, intentando que nadie lo viera diciendo aquello.

-Señor Wick, ¿está en la vanguardia?

-Asi es Sirn Gran, ¿a qué debo esa pregunta?

-Nada, pero creo que nos veremos ahí, tengo el presentimiento que nos enviaran al frente por alguna razón, así que si eso sucede contamos con su escuadrón.

Wick respondió orgullosamente a mi solicitud, eso al menos me hacía sentir un poco más seguro adelante, así por lo menos tendríamos alguien que nos cubra la espalda...

-Hero lo lamento, por un momento se me olvidó que no sabías montar.

Corri hacia el caballo que estaba comenzando a desviarse del sendero y lo detuve. Hero no quiso decir nada por la vergüenza, pero no había que ser un genio para saber que estaba molesta por haberme olvidado de ella por un segundo.

-Idiota. Me grito Hero.

Después de esa pequeña paripé nos dirigimos directamente hacia la enorme carpa central que estaba en el medio del todo, dónde supuestamente un molesto Ogro nos esperaba, pero al llegar parecía alguien que estaba aburrido hasta que aparecimos en la comodidad de su carpa de campaña.

-Sir Gran, al fin nos conocemos en persona de manera directa.

No pude ni responderle su aspecto horrendo simplemente me daban ganas de matarlo en el acto, vengarme ahora, sin que nada importara.

-Dígame Sir, porque se demoro tanto, lo esperábamos hace más de cinco días.

-Tuvimos problemas en el viaje, fuimos emboscados en varias veces por bandidos, pero no supuso mucho problema, solo retrasos. - Contesto Willfest.

-Ex Sir Willfest, estoy hablando con su Señor, le recuerdo que cuando dos Sir hablan, los demás deben quedarse callados, o acaso se le olvidaron los modales cuando le retiraron el titulo. - Dijo airosamente el ogro, buscando la provocación.

Era curioso ver como actuaba ese repugnante ser, nos observaba con superioridad, como si fuéramos meras larvas ante su presencia, nos miraba con la mirada en alto, y siempre con un andar recto, juzgándonos.

-Le pido que no le hable de esa manera mi maestro ¿Sir Ogro?, discúlpeme, nunca supe su nombre solo su apodo, señor. - mencione a regañadientes, aguantándome las ganas de acabar con todo aqui mismo.

-Me agrada que me digan Ogro, puede decirme así Sir Gran, debería reprenderlos como su comandante, a por cierto, se dirigirá hacia mi durante esta campaña como Comandante, o Sir Comandante, como prefiera.

-Muy bien Comandante Ogro, espero que nuestro atraso no suponga un problema, pero ya estamos listo para lo que necesite.

El ogro miro a cada uno de mis acompañantes.

-También tengo que incorporar a las mujeres y niñas a las filas, esto no es una guardería Sir Gran, ellas deberían estar...

-Termine la frase y no me importa quien mierda seas tú, te aseguro que te hago una cicatriz en el otro ojo para emparejarte Comandante. - hable enfurecido.

El desgraciado sonrió de oreja a oreja. Los otros guardias se acercaron hacia nosotros con la mano en las empuñaduras de sus armas, pero el Ogro hizo un gesto.

-Las niñas aguardaran en la carpa, el resto de nosotros lucharemos, son mi gente y están dispuestos a luchar, además le recuerdo que tanto Amelia y Lay de Poart Venture, son mis escuderas, y la mujer a mi lado es mi prometida, así que no quiero escuchar estupidez de ellas salir de su boca Comandante.

-Lo felicito por encontrar prometida, espero que esta vez no termine como la otra traidora de ese burdel asqueroso, y espero que no guarde rencores por tener que hacer mi trabajo con ella, Sir Gran.

Ya no pude aguantar más iba a atacarlo, pero Will me agarro por el hombro para que no hiciera una estupidez.

Simplemente me quede mirándolo con furia.

-Diríjanse a la vanguardia, yo los guiare, los hombres de Wallace nos esperan al otro lado del río, así que prepárense, al alba atacaremos, eso es todo Sir Gran, ya puede retirarse.

Sin despedirme salimos de la carpa de ese maldito, estaba enfurecido, pero al ver una loma no muy lejos de aqui se me ocurrió una idea.

-¿Lay que tan buenas eres con el arco?