498- Obvio

Abi estaba acostada en su cama, mirando al techo, pero el sueño no llegaba. Su mente había estado demasiado inquieta desde que Jorge se fue. No importaba cuánto lo intentara, no podía dejar de pensar en él. Lo había visto después de tantos días y podía notar lo débil que parecía. Sus ojeras eran visibles en su rostro, y se pasaba las manos por el cabello constantemente. La forma en que la abrazó, la forma en que su voz vaciló cuando pronunció su nombre… Seguía repitiéndose en su cabeza.

«¿Realmente la estaba buscando?» Sabía que Olivia y Emma debían estar preocupadas, pero Jorge… No le dio ninguna esperanza la última vez que se encontraron en la oficina de la Señora Eileen.

Anoche, intentó hablar con ella después de la cena, pero se aseguró de que nunca tuviera la oportunidad. No porque no quisiera, sino porque no sabía qué decir o cómo reaccionar. Había intentado estar lo más cerca posible de su familia, fingiendo estar ocupada para cualquier conversación a solas con él.