Confía en Ella

Qiao Nian nunca había esperado que su hermano, a quien siempre había considerado gentil, tuviera un lado tan frío y despiadado.

Además, su hermano tenía razón. Song Yue debería haber muerto en Ciudad Fantasma hace mucho tiempo.

—Si ella recobra el sentido y descubre quién eres, lo divulgará y te pondrá en peligro.

En ese momento, Lu Zhu ocultó la frialdad en sus ojos y su voz se volvió cálida. —Azúcar, una vez te dije que no te pondría en peligro nuevamente.

Cuando Qiao Nian escuchó las palabras de Lu Zhu, no pudo evitar que sus ojos se enrojecieran. Se sentía tan bien estar protegida. —Hermano, eres tan bueno conmigo. En el futuro, podría no poder controlarme. Podría volverse arrogante después de ser tan consentida.

Lu Zhu extendió la mano y tocó suavemente la nariz de Qiao Nian. Sonrió con cariño y dijo suavemente, —Mi hermana tiene derecho.