[Capítulo extra] Toma el asiento del príncipe heredero.

—Tus intenciones son buenas, lo sé. Pero ¿alguna vez pensaste que, al ser reacio a ensuciarte las manos y estar conforme con la escasa libertad que tienes ahora, también estás quitándole el futuro a Chivisea? El príncipe heredero está engañando a tu gente, y si Chivisea cae, tu silencio ya te habrá quitado el derecho a proclamar inocencia. Serás igual de responsable... y eso te hace merecedor de pudrirte en el infierno.

Le siguió un largo y pesado silencio al argumento de Aries. Las dos damas solo sostuvieron la mirada de la otra; una con firme convicción, mientras las otras llevaban emociones encontradas. Veronika estaba perdida. Entendía el punto de Aries, pero hasta ahora, no comprendía la intención detrás de esta conversación.