En cualquier país o imperio, no importa cuán grande o pequeño fuera, siempre había lugares como el mercado negro. Cuando Aries ascendió al trono, se dio cuenta de que, aparte de otros asuntos de estado, el emperador había estado monitoreando el mercado negro en el imperio.
Abel podría haberlo erradicado completamente si así lo hubiera deseado, pero la razón por la que cosas como esta existían en el imperio era porque él lo permitía. En su defensa, no debería haber solamente paz absoluta o bondad total. En ese momento, Aries no se sorprendió porque había escuchado historias sobre rebeliones e incluso había leído los registros. Si no supiera mejor, pensaría que era el ciclo natural de cualquier país.
Pero ay, Aries sabía que algunas de esas rebeliones habían sido incitadas por la gente de Abel —a veces, Conan o Dexter avivaban al pueblo.