Kenzie y Daryl salieron del hospital poco después de cenar con su padre. Mientras estaba en el coche Kenzie llamó a Cris y se informó sobre cómo estaba.
—¿Estás bien? —preguntó.
—Sí, lo estoy. Gracias por preocuparte. Mañana lo explicaré todo en la oficina. Solo quería tener algo de tiempo a solas para pensar las cosas —dijo Cris—. Estaba más relajada ahora. Sabía lo que tenía que hacer.
Estaba contenta de que Brix hubiese respetado su petición y no la hubiera molestado ni por mensaje de texto ni por llamada. Él le había contado todo y ella valoraba su honestidad. Lo amaba y quería confiar en todo lo que Brix le había dicho. Sentía su sinceridad y le gustaba. Tampoco quería perderlo.
Le mandó un mensaje a Brix y le preguntó dónde estaba. Brix respondió y le dijo que estaba en su ático.
Cris se arregló rápidamente y salió corriendo de su apartamento rumbo al ático de Brix. No tardó mucho ya que estaba a solo cinco minutos en coche de su apartamento.