¿Para el deleite de todos?

—Sí —admitió Zhai Sheng—. Volveré para echar un vistazo.

—Presta más atención a eso —no había nada que Qiao Nan pudiera decir—. Ahora que esto salió a la luz, significaba que el Hermano Zhai no había ayudado a encubrir a Wei De. Después de que la Hermana Zhai Hua fue reprendida por el Jefe Zhai, podría estar tan enojada que le pasara toda la responsabilidad al Hermano Zhai.

Qiao Nan estaba preocupada por Zhai Sheng ahora que las cosas habían llegado a tal punto.

La Familia Qiao podría tener muchos problemas, pero esos eran conflictos y asuntos entre los cuatro. No tendrían impacto en los demás.

Era diferente para la familia Zhai. Dado el estatus de la familia Zhai, cualquier problema dentro de la familia tendría un impacto de gran alcance y tenía que ser tratado seriamente.

Justo como lo que Qiao Nan temía, para cuando Zhai Sheng llegó a casa, su familia había estallado en peleas.

Zhai Sheng no había accedido a la solicitud de Zhai Hua de encubrir a Wei De.