La Voz Que Siempre Ha Querido

—¿Negocios? —Han Jintian estaba confundido.

—Si cooperas conmigo, Señora Xie, te garantizo que solo ganarás y no perderás. Definitivamente tendrás un beneficio seguro sin pérdida. Deberías creer que tengo la capacidad, ¿verdad? —Feng Qing se volteó perezosamente en la cama y adoptó una posición muy cómoda.

—Hmph, ¿beneficio seguro sin pérdida? ¿Por qué presiento una conspiración? No me digas que eres como el Noveno Maestro. No aprendiste cosas buenas de él sino su malvado capitalismo —Han Jintian se puso en alerta.

—Tengo recursos y conexiones a mano. Puedo ayudarte a llevar a cabo mejores relaciones públicas. No solo puedo limpiar tu nombre y restaurar tu reputación, sino que también puedo conseguir que obtengas la compensación que mereces —sonrió Feng Qing.