—Hola, señorita Guo.
Aunque Guo Xin no reconoció a Shen Mingzhu, sí reconoció a Du Juan que estaba con Shen Mingzhu y asintió instintivamente en respuesta.
—Hola.
Du Juan habló e introdujo a las dos mujeres.
Al saber que Shen Mingzhu era la gerente general de Meihao Food Company, Guo Xin se sorprendió por la juventud de Shen Mingzhu y también se volvió mucho más seria en su actitud.
Tras breves cortesías, Shen Mingzhu invitó a Guo Xin a cenar.
Guo Xin aceptó.
Sin embargo, puesto que Guo Xin todavía tenía trabajo, acordaron encontrarse en Mantingfang a las siete de la tarde.
Mantingfang era el restaurante de hotpot más famoso de Rongcheng, y como local amante de la comida picante, era Shen Mingzhu complaciendo la preferencia de Guo Xin.
Antes de irse, Shen Mingzhu también le pidió a Guo Xin que trajera a Meng Qi.
Siete de la tarde.
Guo Xin y Meng Qi llegaron según lo planeado.