Capítulo 244

—Vale.

—Además, si Wenyan toma la iniciativa de contactarte, recuerda, no te disculpes como la última vez, ¿entendido? —preguntó.

—No te preocupes. Además, ella nunca se ha acercado a mí por su cuenta —respondió él.

—Bien.

Dai Yang colgó rápidamente el teléfono y luego comenzó a contactar a la empresa de relaciones públicas con la que solía trabajar. Después de una reunión de media hora, se estableció la siguiente estrategia. El primer paso era continuar difundiendo comentarios desfavorables sobre Wenyan en línea. El segundo paso, encontrar inmediatamente a alguien para influir en Qin Yulong, para convencerla de lanzar la bomba. Difundir rumores en línea era barato y rápido. Mientras Dai Yang estaba reclutando gente, su equipo de PR ya había comenzado a avanzar.

—Tsk, tsk, tsk, una vez más la hija del Rey de los Envíos. ¿No puede Wenyan sobrevivir en la industria del entretenimiento sin aferrarse a sus escandalosos socios? —escribió alguien en línea.