—Algodón —respondió Wei Ruo.
—Imposible, la tela de algodón no puede ser tan suave y delicada —dijo Madam Sun.
—¿Entonces Madam Sun piensa que esto está hecho de seda? —preguntó Wei Ruo.
—No está hecho de seda. Yo, Madam Sun, empecé a criar gusanos de seda a los cinco años, a tejer a los siete y a comerciar seda a los trece. Ya sean gusanos de seda de primavera o de otoño, ya sea de Jiangnan o de la región de Shu, puedo distinguirlos con una sola mirada. Apuesto mi reputación a que este material definitivamente no está hecho de seda —afirmó Madam Sun.
—Wei Ruo sonrió levemente —Entonces de hecho, es algodón, hecho de algodón. Pero el algodón utilizado es un poco diferente.
—¿Qué tiene de diferente? —Madam Sun no pudo evitar preguntar.