Capítulo 551 ¿Qué le pasó al Gorrión?

Afortunadamente, sus defensas habían mejorado lo suficiente como para evitar lesiones graves, pero los impactos fueron suficientes para desenfocar su visión por unos segundos, causándole casi perder el equilibrio y tropezar varias veces.

A pesar del constante tropiezo y el sombrío estado en que se encontraba, continuó, impulsado por la urgencia.

Mantuvo su enfoque en su entorno y su espalda, pero por más que buscara, no había nada, nada que lo siguiera. Y eso lo estaba llevando al borde de la locura.

Otro crujido de hojas y el chirriante crujido de los árboles llenaron el aire cuando una ráfaga de viento lo sobrepasó.

El estómago de Gorrión se revolvió y los pelos de la nuca se le erizaron.

—¡Mierda! —gruñó entre dientes, luego saltó hacia adelante, esforzándose por ir más rápido.

—Sólo un poco más —se instó a sí mismo.

Sus piernas ardían, pero no se detuvo, sabiendo que se acercaba a los vastos campos de arroz por delante.