Al principio, Wild y Jessa pensaban que Penny simplemente intentaba evitar lidiar con los hombres de la familia. La familia Bennet no lo dijo, pero en el fondo de su mente, no podían evitar admitir que Jessa y Wild tenían un punto.
Esto se ha demostrado muchas veces — demasiadas veces como para ignorarlo ahora.
Penny era del tipo que sacrificaba a cualquiera para salvarse ella misma. Era cariñosa, pero había esa parte de ella. Y cuando no quería enfrentarse a algo, trataba de evitarlo por todos los medios necesarios. En otras palabras, no les sorprendería si ese fuera el caso.
Pero verla ardiendo de fiebre mientras su esposo la cargaba en sus brazos les preocupaba hasta la médula. Como Penny estaba empapada de pies a cabeza, Allison se ofreció a cuidar de ella. Zoren, por otro lado, tenía que ducharse y cambiarse.
En cuanto al resto de la familia, se quedaron en la sala en completo silencio.