Judas del año.

Por la mañana, Chi Lian acababa de quedarse dormida en el sofá de su oficina cuando alguien la tocó y ella intentó abrir los ojos lentamente y sin ganas. Después de pasar toda la noche creando un nuevo escenario, haciendo ensayos nuevos y perfeccionando tres actos diferentes en la gala de primavera, decidió incluir la canción en la galaxia en la lista de actuaciones. Peter Pan iba a interpretarla después de la charla cruzada. Era un trabajo extra, pero estaba segura de que valdría la pena al final del día.

Se giró, dando la espalda a quienquiera que fuera el intruso no deseado.

Le volvieron a dar un toque antes de que pudiera acomodarse cómodamente. Esta vez, llamaron su nombre.

—Chi-Chi —llamó la voz. La reconoció como la de su madre, así que optó por quedarse quieta. Quizás si se quedaba perfectamente inmóvil, su madre se alejaría y la dejaría en paz.

Aún así, su madre la sacudió una vez más con persistencia.

—Quiero dormir —murmuró.