—¿Q-Qué estás diciendo, Ash? No entiendo muy bien. P-Por favor, acláralo o podría malinterpretarte —tartamudeó Ava mientras intenta dar sentido a lo que Ash acaba de decir.
Las emociones de Ava eran abrumadoras mientras esperaba en secreto que las palabras de Ash se alinearan con sus propios pensamientos. Su concentración estaba gravemente comprometida, no solo por sus intensas emociones, sino también porque todavía estaba montada sobre Ash mientras él seguía dentro de ella.
Ash se levantó a una posición sentada y la envolvió en un cálido abrazo, proporcionando consuelo y tranquilidad. A pesar del confort que sentía en sus brazos, Ava anhelaba escuchar sus palabras explícitamente para asegurarse de que estaban en la misma página.
Después de liberarla de su abrazo, Ash expresó su preocupación por Ava, instándola a relajarse. —Ava, por favor intenta calmarte. Estás temblando y eso me preocupa —dijo él.