—Mauve se sentaba en el pasillo intentando llamar la menor atención posible sobre sí misma. El pasillo estaba bastante silencioso, se preguntaba si la próxima reunión tendría algo que ver con ello.
—Ella levantó lentamente su cabeza de su comida mientras miraba alrededor. Los señores estaban absortos. Había susurros por todos lados, pero ninguno lo suficientemente alto como para oír.
—Bajó la mirada, no quería hacer contacto visual con nadie y luego tener que lidiar con el momento incómodo cuando tendría que desviar la mirada.
—Lanzó una ojeada hacia los pies de Seraphino donde Vae estaba sentada en el suelo. Hizo una mueca mientras miraba fijamente, instando a Vae a que la mirara, pero Vae no se movió.
—Cansada, apartó la mirada de Vae hacia Jael. Él le dio una pequeña sonrisa y Mauve se dio cuenta de que no tenía energía para sonreír de vuelta.