[Capítulo extra]

No era tan tarde por la mañana cuando Su Wan y los demás llegaron al pueblo, aún podía contarse como la mañana temprano. Su Wan acunaba la cesta en la que traía algunos regalos hechos a mano para el director Yuan, el anciano había sido nada más que amable, no solo ayudó a Lin Rui a recibir su respuesta lo más pronto posible, sino que también les presentó numerosos patrocinadores a quienes podían vender sus vegetales, estos pequeños obsequios no eran nada grande, pero aún así era la intención lo que contaba, ¿verdad?

Shen Junxi era alguien que trabajaba en el pueblo y con sus numerosas carnicerías y conexiones, conocía el pueblo mucho más que los hermanos Lin. Con él como guía, llegaron a la academia Xuan antes de lo que pensaban, nunca se perdieron ni una sola vez.