Vivamos Juntos Aquí

—Nunca quiero volver a verla así. Sus manos, su rostro, todo su cuerpo. Todo estaba frío. No respiraba. Su corazón no latía. Era como si ya hubiera muerto. Sentí una sensación de pérdida tan inmensa que nunca antes había experimentado. Mi pecho dolía tanto, pero no sabía qué hacer. Esta es la primera vez que siento tanto miedo y furia dentro de mí. No quiero perderla cueste lo que cueste. No quiero sentir esa desesperación, esa impotencia otra vez. Creí que iba a enloquecer. Si no despertaba, podría haberme perdido y volverme loco. Haré todo lo que esté a mi alcance para que nunca más se encuentre en una situación así.

Habían pasado unos minutos desde que Alwin se fue y Fernando solo la había estado sosteniendo en sus brazos. No ha dicho ni una palabra y simplemente la abrazó, sintiendo su calor y escuchando el latido de su corazón.

Su abrazo era un poco demasiado fuerte, le dolía, pero Arabella hizo lo mejor para soportarlo.