Será solo una semana o un mes

Fernando obedientemente se sentó, y ella envolvió sus brazos alrededor de su cuello, permitiéndole soportar parte de su peso para que le fuera más fácil moverse.

—También puedo besarlo de esta manera.

Arabella capturó sus labios, y él de buena gana le permitió explorar su boca.

«Maldita sea. Me encanta esto. Se siente demasiado bien. Ella es quien me está haciendo esto. Quiero moverme también, pero verla hacer esto también es satisfactorio. Me pregunto por qué está agresiva hoy. ¿Acaso tuvo una pesadilla después de todo?»

—No la tuve. Pero ver tus expresiones me está excitando.

Tampoco sabía que era tan satisfactorio ser la que controlara el ritmo. Si paraba un poco para provocarlo, él emitiría un bajo gruñido de queja. Le encantaría seguir haciendo esto de vez en cuando después de practicar un poco ese movimiento de cadera.