—¿Qué acabas de decir? —preguntó Alpha Regan—. Alfa de la manada de la Colina del Oeste y hermano mayor de Luna Vanessa —preguntó levantándose de su asiento.
Su rostro se había vuelto blanco de sorpresa.
—Dije —mantuve su mirada—. Me casaré con Clarissa, hija del difunto Alfa Logan, pero a cambio quiero derechos de sangre. Un juramento de sangre de cada Alfa en esta habitación, vinculante a cualquier acuerdo que hagamos hoy respecto a mí y a Lyla...
—Y vinculando nuestras manadas a ti por las próximas tres generaciones —agregó Alfa Renwick—. ¿Te has vuelto loco? ¿Cómo te atreves a pensar en algo tan ridículo?
La sonrisa burlona de Alfa Gab, que se había desvanecido en cuanto hice el anuncio, se acercó a mí, su mirada ardía de molestia. —Estás fuera de tus cabales.