Lyla
Mi pecho se apretó.
—¿Puedes ver el futuro?
Para mí, Niñera siempre ha sido, Niñera – la mujer que me malcrió y me ama más que mi madre. Nunca la he asociado con algo tan espiritual como esto. Incluso tener esta conversación con ella ahora mismo, me parecía extraño.
—¡De cierta manera! —murmuró en voz baja—. Es solo clarividencia para cosas importantes que quieren suceder y si estoy unida a alguien, es muy fácil para mí saber cuándo algo quiere sucederle a esa persona.
—¿Entonces sabías todo lo que me iba a pasar? ¿Lo viste de antemano? ¿Por qué no me dijiste que me dejarían plantada en mi día de boda y…
Ella extendió la mano y tocó la mía, deteniéndome. —No puedo... —murmuró.
—¿Qué quieres decir? Acabas de decir…