Lyla
—Deja claro tu postura con Circe —Niñera interrumpió, su voz llena de frustración—. O seguirá acosando a Lyla.
Ambos nos giramos para ver a Niñera de pie en la puerta. Levanté una ceja hacia ella.
—Pensé que me estabas siguiendo detrás —dijo con un puchero, mirando fijamente a Ramsey—. Necesitas descansar. Hoy ha sido mucho.
—Circe no es como Cassidy, estoy seguro de que debe haber una razón… —Ramsey trató de decir.
—Estoy harta de los juegos —dijo Niñera, cortándolo de nuevo.
Ramsey se burló. —¿Qué juegos?
Ella le señaló con un dedo. —O deja clara tu postura con Circe, o seguirá con su acto infantil como lo hizo en el desayuno hoy. Cada día, nos despertamos con una mujer aleatoria que reclama derecho sobre ti. Tal vez sea bueno que aún no estés casado con Lyla. Tienes demasiadas relaciones sin resolver. ¿Qué vas a hacer al respecto?
—¡Niñera! —grité en estado de shock; no necesitaba llegar tan lejos.