Después de salir del comedor Emma se fue a su cuarto entró en el y fue a darse una ducha, cuando terminó de bañarse salió y se puso un camisón color arándanos se acostó en su cama.
— espero que en dos días esto acabe — se dijo asi misma.
Mientras miraba para el techo se quedó dormida y ni cuenta se dió cuando se durmió. A la mañana siguiente Emma se levantó miró su teléfono y se paró de la cama.
Sacó ropa de su clóset, un pantalón negro vaquero y una blusa blanca un chaleco negro y unos zapatos negros entró al baño y se duchó se puso la ropa que había dejado arriba de la cama y fue al baño a secarse el pelo se hizo una coleta y salió de la habitación.
Se dirigió al comedor y cuando estuvo allí no había nadie le preguntó a unas de las criadas, — y el señor Dylan?.
— acaba de salir de la casa señora—
— y Anna se encuentra en casa? — preguntó Emma.
— no señora —
— "ok gracias " —
La criada se fue y Emma se fue a la cocina a prepararse un sándwich para ella, se acercó a la nevera sacó los ingredientes y cogio el pan que se encontraba en la defensas, lo prepararon y después se fue al comedor a desayunar cuando terminó recogió todo y llevo los platos a la cocina comenzó a limpiarlos cuando terminó se arregló para salir.
Ya Emma dirigiéndose a la puerta un hombre la detuvo y le dijo — señor usted no puede salir de la casa son ordenes de su marido.
— como que no puedo salir de esta casa llame a su jefe — le dije Emma con el ceño fruncido.
— ok señora —le dijo el hombre.
El hombre sacó su teléfono y comenzó a llamar a Dylan, cuando Dylan cogio el teléfono el hombre comenzó hablar con él.
— señor la señora me pidió que lo llame porque quiere salir de la casa —
— Pásamela — dijo Dylan
— que pasó — le dijo él a ella
— no soy una prisionera para que me tenga encerrada dentro de tu casa — le dijo ella gritado.
— desde ahora no tiene permitido salir de la casa hasta que yo lo diga—
— no puede hacer eso —
— si puedo soy tu esposo y tu me pertenece ahora —
Emma enojada colgó el teléfono y entró de nuevo a la casa: ¡que voy hacer ahora!, ¿como voy a salir de esta casa?, no puedo quedarme aquí. Hora pasaron y ella no hallaba que hacer hasta que entró en una habitación había estante lleno de libros, ella cogio un libro y comenzó a leerlo hasta que llegó la noche se había quedado dormido en esa habitación.
Ella después despertó y salió de la habitación se dirigía la cocina cuando Dylan iba entrando a la casa ella lo ignoró y siguió a la cocina, agarró un vaso y fue hasta la nevera lleno su vaso y bebió el agua. Cuando terminó se fue a su habitación a darse un baño.
Se puso la ropa y subió para ir al comedor se sentó en la mesa y no dijo ni una sala palabras cuando terminó de comer se paró para ir pero una voz la detuvo.
— no vas hablar conmigo no me vas a suplicar que te deje salir? — le dijo Dylan con una sonrisa en su labios.
— yo no tengo nada que hablar contigo y mucho menos suplicarte nada — le dijo ella con una cara de enojo.
—ay querida esposa si haci lo quiere—
— yo no soy tu esposa idiota—
— no me hagas enojar Emma hoy estoy de muy buen humor — le dijo el mirándola a los ojos.
Emma se fue y lo dejó solo en la mesa entró en su habitación y comenzó a reglar sus maletas mañana era el día que iba hacer libre de aquel hombre que la arrebató de su familia. Una vez que términos se acostó y se quedó dormida.