—Ann gimió empeorando al ver que todo su esfuerzo por quitar las manchas de su vestido era inútil. La bebida que Silver había derramado sobre su vestido mojó su pecho y el contorno de sus pechos se revelaba visiblemente a través de su vestido.
—Mierda —maldijo enojada.
—Tranquila, no está tan mal —dijo Silver.
—¿En serio? ¡Porque mi vestido está arruinado todo por tu culpa, deberíamos irnos ahora! —Ann dijo mientras agarraba a Silver por la muñeca y la arrastraba consigo mientras caminaba hacia la puerta.
—¿Qué pasó con 'vamos a conseguir acción'? —preguntó Silver mientras seguía a Ann desde atrás.
—Mi vestido...
Cuando llegaron a la puerta, el hombre que habían estado admirando antes se colocó frente a ellas. Se apoyó en la puerta, cruzando los brazos mientras se interponía en su camino.