SIN TETAS

—Silver gimió por el peso pesado que la envolvía cuando intentó girarse hacia el otro lado de la cama. Primero pensó en una persona que podría envolverla de esa manera y esa era su mejor amiga Ann, pero cómo era posible que ella estuviera aquí en la misma cama con ella.

—Su corazón se sobresaltó; recordó que Ann se había ido y no había nadie más con quien pudiera imaginarse pasando la noche; ya había roto con Diego y no vive con sus padres.

—Jadeó y abrió los ojos de golpe. Su vista no podía ajustarse a la oscuridad mientras sentía que su cabeza estaba enterrada en algo duro, algo muy masculino. Deslizó su mano hacia arriba para sentir el marco en el que estaba apoyada su cabeza, esto no se siente bien. Estaba acostada en una cama pero podía sentir un brazo fuerte rodeándola y su frente contra un marco sólido.

—Intentó imaginar quién podría ser mientras pasaba su mano por todo el marco contra el que estaba su frente.