—Quiero follarte, ahora mismo y aquí mismo —dijo Marcos y un escalofrío recorrió instantáneamente hasta su coño.
Su clítoris latía por la emoción que fluía a través de ella. Había fantaseado con que él la follara hasta hacerla correr mientras se masturbaba antes en el baño. Estaba tan emocionada que su sueño finalmente se estaba haciendo realidad. Tragó antes de decir, aunque su respuesta no era necesaria, "Sí, por favor, señor. Fóllame". Suplicó y él se colocó detrás de ella y se arrodilló con una rodilla, luego bajó la cremallera de sus pantalones y sacó su polla de su pantalón, luego rodeó su mano alrededor de su polla y comenzó a masturbarse lentamente hasta que se endureció. Colocó su mano sobre su hombro mientras bajaba ligeramente su cadera y luego dirigió su polla hacia su entrada. Podía sentir su humedad justo cuando la cabeza de su polla empujaba su apertura.