—Mamá, ¿por qué soy tan desafortunada? ¿Por qué Dios está haciendo esto conmigo? —gritó ella.
—Lily, ¡cálmate! —rugió Deborah.
—¿Cómo puedo calmarme? Lo he esperado y lo he amado durante tantos años, pero solo pude verlo casarse con otra mujer. Después de aguantar todo esto y terminar embarazada de su hijo, Dios nuevamente lo alejó de mí. Ahora que él aceptó comprometerse, tuvo un accidente en el último minuto. ¿Por qué? ¿Qué hice mal? —protestaba Lily.
Lily miró a Deborah con los ojos inyectados en sangre. Había amado a Edric de todo corazón durante muchos años, pero él la ignoró y se casó con Irene.
Para conseguir a Edric, ella halagó a Margaret y trató todos los medios con Deborah para evitar que Irene quedara embarazada.