—Señorita Nelson, ahora ya sabe por qué me opongo a su relación con Jordan. No es porque sea una madre soltera o una divorciada, sino porque usted es la hija de alguien a quien Jordan odia más que a nadie. Por causa de su madre, Jordan perdió a su padre desde que era un niño. Si él se entera de que usted es la hija de la mujer que le arrebató a su padre, ¿qué pensará? —La voz de Pedro era como un potente y tenso neblinero, lenta pero poderosa; cada palabra suya era devastadora—. Piénselo bien. Si puede estar con Jordan sin sentirse culpable, no me opondré a su relación. Pero no puede ocultar la verdad. De lo contrario, cuando Jordan la descubra...
Irene intentó por todos los medios mantener la calma, pero aún así las lágrimas se acumularon en sus ojos. Fue un golpe tremendo para ella. No quería llorar frente a extraños, por eso se levantó y se despidió de Pedro. Observando su espalda erguida, el corazón de Pedro no pudo evitar dolerse por ella.