La Señora Guo tomó la mano de Su Xiaoxiao y sonrió tranquilizadora. —No te pongas ansiosa; todavía necesitamos consultar al doctor. Si el doctor dice que no hay impacto, seguiremos con tu plan, ¿de acuerdo?
Jiang Yexun asintió en señal de acuerdo. —Mientras el doctor dé luz verde, seguiré tus deseos. Y en cuanto al Colegio para Trabajadores y Agricultores, no necesitamos apresurarnos. Puedo ayudarte a conseguir una recomendación para estudiar en Shanghái más tarde.
En los últimos años, Big Gao había asegurado muchos recursos valiosos, y Jiang Yexun también había encontrado numerosas cosas en las montañas. Por lo tanto, conseguir un lugar en el colegio no sería difícil para Xiaoxiao, especialmente porque era una estudiante de secundaria. Él encontraría un trabajo en Shanghái, y dado que los padres de Su Xiaoxiao estaban allí, no sería demasiado difícil de trasladarse una vez que ella fuera admitida.