CAPÍTULO 31

PUNTO DE VISTA DE AMELIA

Estaba teniendo el sueño más dichoso sobre estar en un jardín etéreo con un bello horizonte y agua brillante como cristales. No recuerdo exactamente qué estaba haciendo, pero entonces comencé a escuchar la voz de Clara. Al principio estaba muy confundida y miré a mi alrededor esperando verla, pero no estaba por ningún lado. De repente, desperté y los restos de mi sueño fueron arrasados por la conciencia de la realidad.

Busqué a Clara pensando que estaba en mi habitación, pero mi habitación estaba vacía y mi puerta seguía cerrada. Comencé a pensar que había imaginado su voz en mi sueño cuando de repente escuché su voz tan clara como el día en mi cabeza.

—Despierta —decía una y otra vez y yo estaba confundida por unos segundos.