Punto de Vista de Sophia
Me encontraba acariciando la espalda de Lex suavemente. Mi corazón latía desbocado.
—¿Le pasa algo a Lex? —pregunté, intentando girar la cabeza para poder ver a mi mamá—. ¿Qué está pasando, mamá?
No podía moverme mucho porque Lex me sostenía demasiado fuerte. No podía ver la cara de mi mamá claramente, pero lo poco que veía me preocupaba aún más que antes. Apreté mis brazos alrededor de Lex y mantuve mi mirada en mi mamá.
—Alex está bien, cariño —dijo mi mamá y me relajé de inmediato—. No se trata de él.
Mientras Lex estuviera bien, todo estaría bien.
—¿Entonces de quién se trata? —oí preguntar a Hunter—. ¿Qué demonios ha pasado?
Lex puso una mano en mi cabeza y me presionó aún más contra él.
—Se trata de tu oscuridad, Fia —dijo Lex, con voz temblorosa—. No se fue. Todavía está aquí.
Me quedé completamente helada.
¿Qué?