CAPÍTULO 285 Vivir para Servir

Tan pronto como Steve se materializó en la habitación y cruzó miradas con Lexi, sus labios se curvaron en una sonrisa traviesa.

—Bueno, hola pequeño rayo de sol —guiñó un ojo—. ¿Cómo va la vida?

—Eterna —respondió Steve con una cara de piedra, sin un ápice de emoción en sus ojos mientras se volvía para mirar al Señor Brarthroroz con la misma expresión imperturbable—. ¿Me llamaste?

El Señor Brarthroroz ignoró las risitas de Lexi y se fue directo al grano.

—Necesito transportar algunas de nuestras fuerzas aquí, principalmente cambiones y sus manejadores —explicó el Señor Brathroroz—. Unos cuantos mímicos también. Puede que necesitemos más adelante, pero ya lo veremos en su momento.

—Vivo para servir —hizo Steve una leve reverencia mientras las comisuras de su boca se torcían.

—No puedo decidir si había o no un dejo de sarcasmo en eso, Steve —rugió el Señor Brarthroroz mientras inspeccionaba su rostro cuidadosamente buscando alguna señal reveladora.