Selene quedó atónita durante unos segundos. Su respiración se volvió superficial, entrecortada... hasta que los fríos y agudos pitidos de la llamada desconectada la hicieron volver a la realidad.
Había intentado por todos los medios negar lo que Olivia le había dicho.
No quería creer que Aiden realmente tenía a alguien en su vida... que se había casado con otra mujer que no era ella...
Pero ahora, con Aiden confirmándolo él mismo, tan cruda y descaradamente, ¿cómo podía negarlo más?
—¡Arhhh! —gritó, lanzando su teléfono al suelo. Su voz estaba llena de furia.
La pantalla se rompió instantáneamente, sus piezas se hicieron añicos al igual que su orgullo.
Aiden puede que haya hablado dulcemente con ella, pero sus palabras atravesaron profundamente su autoestima, haciéndola sentir humillada.
¿Cómo podía elegir estar del lado de alguien que no era ella?
¿Cómo podía avergonzarla por otra persona?
—¡No! —gritó nuevamente, arrojando cualquier cosa que pudiera agarrar con su mano.