+Capítulo 199+

El hombre regresó en un instante, con una bebida en una taza sobre una bandeja.

Caspian se sorprendió gratamente de que tuvieran bebidas calientes en el club, tomando un sorbo de la bebida sin examinarla, demasiado ansioso por calentarse.

El trago que tomó le quemó al bajar, sus ojos se llenaron de lágrimas. —Eso es alcohol —tartamudeó, el sabor difícil de manejar.

—Con ginger ale —proporcionó el hombre de forma útil—. Te ayudará a calentarte bien.

—¿Puedo conseguir una sin alcohol? —preguntó con voz lastimera.

Caspian admitiría que la bebida lo calentó de inmediato, pero también le nubló la mente, y no le gustaba ese efecto secundario, ni apreciaba el sabor.

—¿No quieres la ginebra? Podría traerte whisky en su lugar, o vodka...

Caspian sabía que solo trataba de ser útil, —Nada de eso por favor, solo ginger ale y tal vez limón.

—Enseguida.