-Capítulo 266-

Davian lo miraba con tanta confianza abierta que lo hizo vacilar.

¿Siempre estaba el Rey de la Mafia tan vulnerable durante su celo? Todas sus defensas estaban abajo, sus ojos normalmente vacíos mostraban tanta emoción.

—Voy a usar tus juguetes en ti —se encontró explicando torpemente, sintiendo que estaba aprovechándose de Davian.

—Avísame si te duele, ¿vale? —advirtió, empezando a pensar que debería haber dicho eso antes de ponerle el anillo para el pene.

El anillo para el pene acentuaba las venas palpitantes en el pene de Davian, no parecía estar incómodamente apretado, y El Alfa no intentaba quitárselo así que lo tomaría como un informe positivo.

—¿Y no te irás si lo hago? —Davian preguntó suavemente, sonando menos tenso después de su primer orgasmo de la noche.

—No lo haré —dijo Lake distraídamente, sin tener problemas en asegurarlo constantemente como Davian le había pedido cortésmente, distraído con el juguete en su mano.