—Lake solo quería molestar al Alfa diciendo eso, pero Davian se lo tomó en serio.
—Está bien, vamos de compras juntos —aceptó, volviendo al portátil.
—Incluso podemos almorzar fuera —agregó, comenzando a organizar los correos electrónicos lo mejor que pudo. Era un trabajo bastante repetitivo y era fácil de entender siempre que supieras cómo funcionaban los correos electrónicos.
—¿No estamos contratando secretarios para esto? —Davian interrumpió su tarea, asomándose alrededor para ver la pantalla.
—Bueno, sí, estaba justo frente a mí —dijo consciente de sí mismo.
—Puedes entrevistar a los secretarios si quieres —ofreció Davian, prestando mucha atención a Lake—. Y puedes supervisarlos, así como revisar los informes mensuales...