Despertar y Recuperación

—Hmm... Has mejorado mucho. A menos que ocurra algo inesperado, estoy bastante seguro de que te recuperarás pronto.

—¿En serio?

Lili estaba más emocionada que Serafina mientras miraba al doctor que estaba justo a su lado. Las palabras tranquilizadoras del médico trajeron un alivio visible al rostro de Lili, su entusiasmo brillando intensamente.

—Además, también debes tomar mi receta regularmente y a tiempo. Nunca debes saltártela, ni siquiera una vez —dijo la señora doctora.

—Está bien —Serafina asintió firmemente, su compromiso de seguir las órdenes del médico evidente en su expresión decidida.

Tan pronto como el médico dejó la habitación, Serafina echó un vistazo rápido a su alrededor. Había una serie de cortinas gruesas, montones de mantas y alfombras esponjosas que cubrían el piso de mármol. El extraño calor que permeaba no parecía ser el resultado de su enfermedad después de todo, pensó. La habitación estaba intencionalmente mantenida caliente para ayudar a su recuperación.