Saldando la larga deuda [1]

—Phat…

La bofetada resonó en el salón.

Julia frunció el ceño. —Hermana, ¿qué significa esto?

—Vamos, necesitamos disculparnos —dijo Kelly en voz baja, su voz llena de arrepentimiento.

—¿Por qué deberíamos disculparnos con Kent? Él es quien te golpeó y te arrebató la oportunidad de obtener la herencia del Dios de la Tormenta... —Julia continuó parloteando en voz alta.

Kelly alzó de nuevo su palma, pero se detuvo a mitad del camino antes de dar otra bofetada.

—No a Kent, sino a Fatty Ben. Le hemos hecho un mal en primer lugar... y ahora, tenemos que hacer lo correcto.

El rostro de Julia se torció en sorpresa. —¿Fatty Ben? ¿Pero dónde lo encontraremos? Ese gordo podría estar en cualquier parte.

Kelly apretó los puños, la determinación asentándose en sus huesos. —No sé dónde está, pero lo encontrarémos. Tenemos que hacerlo. Decidí enmendar las cosas con Kent.