Las raíces de los árboles penetran en el suelo de la montaña, dejando que sus manos verdes se alcen hacia el cielo. Troncos de árboles gruesos y sólidos se enfrentaban entre sí, pareciéndose similares a través de las distancias. Las ramas exuberantes y las hojas se entrelazaban en el aire.
Bajo el entorno de estos árboles había una casa de madera.
La casa de madera estaba hecha completamente de gruesas cortezas sólidas, desprendiendo un tipo de olor genuino y firme. La casa de madera no era de reciente construcción, pero había acumulado muchos años. Así que la superficie de la casa tenía musgo verde creciendo por todo, y algunos de los troncos de árboles habían comenzado a brotar pequeñas ramas tiernas.
Alrededor de la casa de madera había una valla alta y grande construida con bambú verde en forma de lanza. La parte trasera y frontal eran campos de verduras, y en medio de los campos había un pozo hecho por el hombre.